Hablar de voluntariado, es hablar de personas muy especiales, ellos son personas que saben poner alma, vida y corazón en todo lo que hacen y dar lo mejor de sí mismos: un trocito de su vida, su tiempo, su trabajo, pero sobre todo, su cariño para hacer felices a los demás sin escatimar esfuerzos; ellos siempre están allí donde se les necesita, son como fuertes columnas que sostienen grandes edificios.
Ellos desprenden en todo momento: ilusión, energía, constancia, profesionalidad y mucha alegría y buen humor, da gusto de estar a su lado. Así podríamos definir a todos los voluntarios que son parte integrante de la Asociación Pídeme la Luna.
Y los tenemos de todas las edades: desde un numeroso grupo de jóvenes universitarios de las más variadas ramas, que son los que cada día de la semana (incluidos Domingos y Festivos) acuden puntuales a nuestro Hospital, para llenar de luz y alegría las habitaciones de todos nuestros niños en la Unidad de Onco-Hematología y acompañarlos, entretenerlos, jugar con ellos y hacerles más llevaderas sus largas tardes en el hospital, creando ese ambiente entrañable y familiar que siempre transmite Pídeme la Luna.
Así mismo, se ocupan de acompañar a nuestros niños en todos los viajes lúdicos que organiza la asociación, consiguiendo que las mamás descansen un poquito y disfruten ellas también de éstos viajes, sabiendo que nuestros niños están super bién atendidos con sus voluntarios, a los que quieren con locura.
Pero también contamos con otro nivel de voluntarios de distintas edades que son un gran apoyo para nuestra asociación, y que se ocupan de organizar y atender infinidad de actividades de carácter solidario y de una gran variedad, al mismo tiempo que secundan y apoyan todas las iniciativas que organizan tantos colaboradores y amigos en cualquier punto de la geografía jiennense, para recaudar fondos y poder autofinanciar nuestro proyecto. A estos voluntarios podríamos definirlos como: la “Joya de la Corona”.
No queremos dejar de mencionar todos los pueblos de nuestros voluntarios: La Carolina, Linares, Porcuna, Jódar, Torredelcampo, Torredonjimeno, Martos, Navas de San Juan, Torreblascopedro, Begijar, Vilches, Arjona, Andújar, Huelma, Bailén, Jabalquinto y Arjonilla, sin olvidar a otras ciudades como: Granada, Valencia y Pamplona, desde donde recibimos tan inestimable ayuda y sobre todo por tanto cariño con el que arropan cada día a nuestra “Fábrica de Sueños” Pídeme la Luna. Para todos ellos todo nuestro cariño y gratitud y un fortísimo abrazo.
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