Vivir un gran sueño, Eurodisney

Había llegado el gran día, estaba amaneciendo el 10 de Septiembre de 2015, nuestros niños de Onco-Hematología del Hospital Infantil de Jaén (España) iban llegando al punto de encuentro. Algunos venían de lejos. Una ilusión desbordante y un intenso brillo en sus miradas arrebataban al madrugón, iban a vivir todos juntos uno de sus grandes sueños y acompañados por sus familias y un completo equipo de profesionales: médicos, enfermeras y auxiliares de enfermería, se dirigían a Córdoba para tomar el AVE. Ésta era también la elección de los niños para viajar a Disneyland París, y así se hizo.

Magníficos responsables de RENFE nos acompañarían en todo momento en Córdoba y más tarde en Barcelona, donde se volcaron con nosotros de una forma especial, con detalles de cariño y algún regalo hasta dejarnos acomodados en el AVE. Con gran expectación nuestros niños examinaban todos los detalles que iban descubriendo en el tren y como una gran aventura recorrían sus distintos vagones y alucinaban sobre todo con su velocidad de 300 Km/h.

La magia de la noche crecía al llegar a la bella “ciudad de la Luz” que nuestros niños admiraban con asombro. Era como si París, con su rio Sena, se rindiera a sus pies poniendo a su alcance tanta belleza con la que hacer un gran homenaje a nuestros campeones y poco a poco iban descubriendo los espectaculares Campos Elíseos, Arco del Triunfo, Plaza de la Concordia, La Bastilla, hasta llegar a la emblemática Torre Eiffel, inmortalizándola con sus cámaras y teléfonos móviles. Es increíble con que intensidad viven estos niños cada momento de sus vidas y la gran capacidad que tienen para disfrutar todo lo que se les pone por delante.

La noche avanzaba, ya se notaba el cansancio, pero un precioso y confortable hotel Explorers en Disney nos daría la bienvenida donde todos encontraríamos un merecido descanso. Al día siguiente un sol radiante nos despertaba y nuevamente de la mano de PIDEME LA LUNA llegaban nuestros campeones a Disneyland París. Una vez más soñaban, pero despiertos. Una vez más sus sueños se hacían realidad. Una mezcla mágica de ilusión alegría y nervios le hacían vivir con la mayor intensidad tanta belleza, dejando atrás los días del hospital, sueros y tratamientos para ofrecerle la mejor de las terapias: el abrazo tierno de Mickey, Minnie, Goofy, Pluto, Pato Donald, Blanca Nieves o Peter Pan. En sus retinas quedarán grabados para siempre estos días inolvidables. ¡¡Gracias campeones!! Por ese gran ejemplo que nos dais cada día de lucha y superación y sobre todo porque jamás perdéis la alegría.

¿Cuál será el próximo sueño de nuestros niños? Pronto lo sabremos, pero mientras tanto, esta fábrica de sueños que es PIDEME LA LUNA seguirá trabajando con la misma intensidad, ilusión y esfuerzo para hacerlos a todos muy felices, este será siempre nuestro único objetivo.

Queremos agradecer de todo corazón la ayuda que recibimos de tantos amigos que con sus bonitas y variadas iniciativas van aportando cada día su granito de arena para que todos estos sueños se hagan realidad.